Juan Manuel Montilla, más conocido como «El Langui» tuvo que enfrentarse el pasado 18 de febrero a un desagradable suceso relacionado con la accesibilidad en los autobuses interurbanos. Lamentablemente no ha hecho falta esperar mucho para encontrar un nuevo ejemplo de inaccesibilidad e inadaptación del transporte público, transporte con todavía demasiadas barreras que afectan directamente a los viajeros. Tal y como vimos en la «Guía de la accesibilidad en los autobuses», realizada por CheckMybus, los autobuses interurbanos son uno de los medios de transporte menos regulados en cuanto a lo que accesibilidad se refiere.
¿Autobuses accesibles para todos?
+++ Los hechos +++
➠ El pasado 18 de febrero de 2016 un ususario habitual del transporte público se dirigía a la parada de autobuses de Villaverde Bajo Cruce a coger el autobús 412 dirección San Martín de la Vega.
➠ El usuario en cuestión utiliza una silla de ruedas motorizada para sus desplazamientos.
➠ El conductor le prohíbe el acceso, alegando que su silla motorizada no está autorizada a acceder al transporte público.
➠ El ususario decide bloquear con su silla de ruedas motorizada la salida de los autobuses en la parada.
+++ Las consecuencias +++
➠ Hasta 4 autobuses de la misma línea retenidos y más de 150 viajeros afectados.
➠ Durante casi 3 horas de confusión, ni la policía, ni la compañía de autobuses, ni el propio Consorcio de Transportes fueron capaces de ponerse de acuerdo.
+++ Las causas +++
Según Juan Ignacio Merino, gerente del Consorcio General de Transportes de Madrid, el incidente se debe a un «vacío legal» que se pretende solucionar «lo antes posible». Al parecer la silla de ruedas motorizada en la que se desplazaba el pasajero es un modelo muy reciente, y por ello todavía no está incluído en el reglamento de viajeros.
+++ Conclusión +++
Como bien dice el gerente del Consorcio General de Transportes de Madrid, se trata de un tema pendiente, que como muchos otros deja a los autobuses interurbanos no muy bien parados en temas de accesibilidad. Metro, Renfe Cercanías y los autobuses urbanos de la EMT sí permiten viajar con este tipo de vehículos, pero en el caso de los autobuses interurbanos depende del criterio de cada empresa.
Una vez más es evidente que la falta de regulación y la consecuente falta de unaminidad entre las distintas empresas, hacen que la accesibilidad universal de los autobuses interurbanos esté lejos de ser una realidad.